¿Cómo ser un buen líder para su empresa?

 

En una época de crisis como la que vivimos, cada vez más necesitamos a buenos líderes para las organizaciones. Pero, ¿es lo mismo mandar que liderar? En las siguientes líneas trataremos de contestar a esta cuestión.

Tal y como se expone en esta ilustración, podemos decir que las diferencias entre ambos son palpables y parece que sólo adoptando esta posición se podría llegar al éxito empresarial. En este sentido, os exponemos los principales factores para convertirnos en buenos líderes de nuestras organizaciones:

–Creatividad. Un buen líder debe aportar soluciones innovadoras, fomentar un entorno donde se generen ideas novedosas y asumir los riesgos derivados de ellas.

–Carisma. El líder debe ganarse a su equipo de trabajo para que éstos saquen lo mejor de sí mismos.

–Inteligencia emocional. La inteligencia emocional te ayuda a reconocer y gestionar emociones, comportamientos; percibir y observar claves de la conducta en grupo esenciales para el liderazgo.

–Visión de futuro. La visión a largo plazo debe estar implantada en el ADN del líder para ir siempre por delante.

–Convicción. El líder ha de ser el primero que crea en su propio proyecto para así inspirar determinación en su equipo.

–Comunicación. La comunicación tanto interna como externa de la organización debe de saber gestionarse de forma óptima por el líder.

–Resolución. La actitud del líder debe estar completamente orientada a la resolución rápida y efectiva de los problemas que surjan.

–Negociación. La persuasión argumentativa con los distintos públicos también debe de ser uno de los principales fundamentos del líder.

Y finalmente para todos aquellos jefes que se quieran convertir en verdaderos líderes ofrecemos tres consejos para su iniciación:

 –Nunca dejes de educarte a ti mismo. Todo lo que sea susceptible de aprendizaje aporta valor a tu equipo de trabajo.

–Desafíate a tí mismo constantemente. Un líder debe superarse constantemente y buscar desafíos. 

–Da a los demás sin pedir nada a cambio. Un verdadero líder es desinteresado. A un verdadero líder le encanta dar a otras personas. Le encanta llevar alegría a la vida de otras personas. Un verdadero líder es muy respetado por la gente debido a estas cualidades. El verdadero líder es admirado por lo genuino que es, por lo que se preocupa por las personas.

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